MDH Ramón Larrañaga Torróntegui
Viernes, 6 de Enero del 2017. 2:58:19 pm
Letra más grande
Normalmente cuando entramos a reflexionar sobre la relación de pareja (Hombre/mujer), nos salta la pregunta ¿quién seduce a quién? Uno seduce y el otro atrapa. Podrían cambiar rápidamente de posición y es natural que en una relación existan momentos en que una persona sea más fuerte que la otra y en ello lleve esa ventaja, pero también la manipulación de la situación no deja en preocupar el resultado puesto que al jugar en el amor aunque puede ser emocionante se corre el peligro al jugar con fuego en quedar atrapado sin una respuesta adecuada.
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Y, es Allí donde el demonio mete la cola y juego deja en serlo al cambiar los intereses según lo puesto en la conquista. Uno puede ser justo, leal pero se olvida en cierto momento de esta lealtad para ser lo que desea ser dejando abandonado lo justo por lo correcto y seguro cae en la tentación presente. En amor mutuo, es natural que la relación genere felicidad, que se sienta liberado, reposado al saber que cuenta con la otra persona.
El exceso en convivencia en el trabajo se ha vuelto una mezcla brutal en desafío cuando se tiene tanto tiempo con otra persona fuera del hogar Proximidad que proporciona ideas descabelladas y no son nada buenas para la lealtad Ambiente absorbe el seso El continuo roce puede llegar a desmoronar la relación con la que se cuenta en casa. Las personas son celosas analíticas del éxito de otra persona y si se trabaja con quien se valora en esta forma nacerá la pasioncilla hacia la persona que vive con lo que se desea Caminante, no hay camino Ver la imagen del éxito que se anhela es quitar presencia a la persona con la que se convive y se tiene una relación.
Se prefiere soñar con la persona con la que se convive en el trabajo y comparar con la que se tiene en el hogar, esto Tiene un precio que se paga con altos intereses. La tentación, es el camino corto a la traición. No se puede anhelar otra persona cuando se ama a la persona con la que se tiene una relación. No se ve en otra persona características deseadas para minimizar lo que se ama. Quien se han dejado llevar por este engaño termina fracasando en cuanto relación amorosa Paga el precio Y, a pesar de costearlo no terminan en abonar la parte dañada sentimental con la que sale. ¡Si hay seducción hacia otra persona que no es la de la relación No, es amor!
Afortunadamente siempre traemos en la cabeza proyectos que en la mayoría de las ocasiones no funcionan o se tardan demasiado en funcionar. Pensamos en establecer prioridades sin embargo la mente nos dicta otro tipo de proyecto y este último en ocasiones nos deja sin dormir. En general son tantos los proyectos en nuestra vida que en su mayoría terminan por pasar sin que los recordemos por ello es mejor.- Céntrarse y concentrarse en lo que se ama y con quien se cuenta.- Es frustrante traer en la cabeza tantas cosas y sobre todo el tratar de regresar un pasado que se ha marchado A nadie le gusta que su pasado lo alcance Sobre todo cuando se trata de valorar una relación, que se quedo acumulada en el tiempo y le trae recuerdos cada cierto tiempo.
Cada vez invocas de diferente manera a veces con triste memoria y otros nostálgicos en espera del que el tiempo ya no acumule pasión en ella. Cada uno habla de amor y su pasado a su manera Invoca recuerdos o niega tempestades conforme le fue en esa fiesta. En lo que si no cabe duda es que El amor es grande, más de lo que uno se lo imagina y no es extraño que nos vuelva celosos Codiciosos por poseer lo que se ama y desea. Muchos hablan del amor a favor o en contra. Otros utilizan fechas para resaltarlo o para demostrar su ausencia Entre elogios y desdenes
Solo el amor nos hace libres cuando se puede opinar en forma divergente con la persona que se tiene la relación. Si no existe esta característica se crea un desastre, una atrocidad entre te tuerzo el brazo o contaras con mi ausencia. Queremos un amor que nos apoye cuando nos mueven el piso en diferentes motivos o causas. Uno que encaje con nuestra visión de vida, que valore lo que somos sin condicionamientos.
Ver victorias, en otra persona Ajena a la relación no debe afectar nuestra cabeza, ni llenarnos de malas intenciones. Los sentimientos cuando se ama son espontáneos, son un toque ingenuo del alma que garantiza tranquilidad. Los espíritus débiles se la pasan mirando a otros que están fuera de su relación y no escuchan la voz del alma La malicia es su dueña Son espíritus que están formados para pocas cosas y buscan desesperados lo que creen no han encontrado. Valoran que es con otra persona Siempre donde las cosas funcionan excelentemente y no con la que se encuentran en relación Los sentimientos malvados castigan la tranquilidad Los templados viven en la recompensa. Alegrémonos que este mundo está lleno de amor y siempre está uno esperando al otro para encontrar su par, mientras los débiles, inquietos seguirán renunciando a pesar de encontrarse con ellos.
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