Un problema de todos:

Las vías del ferrocarril de Tepic

Pedro Luna Jiménez. Y José Octavio Camelo Avedoy,

Viernes, 20 de Abril del 2012. 6:09:11 pm

Letra más grande

La llegada de las vías del ferrocarril a Tepic fue en las proximidades del año de 1912, las mismas llegaban de Nogales a Tepic, pero se cortaban aquí, no siguen al sur. Para el año de 1914 se encontraban destruidas y abandonadas, por el proceso de la Revolución Mexicana, es hasta el año de 1927 que se reparan la vías del ferrocarril y es cuando Tepic tiene conexión hacia el norte y el sur del país, es decir, que Tepic llega a la modernidad del ferrocarril muy tarde, mucho después del porfiriato, en donde el ferrocarril fue un distintivo de su dictadura. Tepic, queda comunicado a la modernidad ferroviaria cuando ésta ya había pasado a segundo término, ya que las carreteras eran la nueva modernidad, en aquel entonces se presenta recientemente el Plan Carretero Nacional, en donde Nayarit se conectaba con la carretera a Nogales.

El ferrocarril llega del norte, pero su trazo, contemplado desde 1890, cuando se consideraba el ferrocarril en ésta región, se decía que llegaría por los municipios del norte y arribando a San Blas, y de allí llegaría a Tepic,. Pero sucedió que llega por las montañas con la gran intención de conectar a uno de los emporios azucareros de la casa Aguirre, por ello llega a Puga y Mora, y entra a Tepic, por ello el trazo caprichoso actual, la importancia era comunicar la hacienda de Puga, con un aproximado de 100 mil hectáreas de zonas ganaderas y agrícolas, en donde se puso una estación del ferrocarril llamada estación Aguirre, en honor a la empresa propietaria de dicha unidad de producción. Entonces llega a la ciudad de Tepic de manera secundaria, ya que la prioridad era conectar a Puga.

La estación de Tepic queda a la orilla de la ciudad, para dicho momento histórico, lo cual propicia que la ciudad de Tepic crezca su mancha urbana hacia dicho punto cardinal, surge entonces la colonia la estación y lleva a construir la calzada Álvaro Obregón (actualmente Benito Juárez), con ello surgen dos grandes hoteles: el Sud-pacífico y hotel Palacio, los que se unen al ya establecido hotel Bola de Oro. En torno a la vía se pusieron embotelladoras de refresco, las diferentes cigarreras, las desveladoras de tabaco, todo el modelo desarrollista del fordismos. La vía opera como parte de la infraestructura necesaria para el modelo producción y comercialización de dicha época histórica, por lo tanto fungieron como sinónimo de desarrollo económico, esa misma infraestructura que fungió como necesaria para el crecimiento económico, pasan a ser un estorbo infuncional para la mancha urbana actual, porque los medios de transporte de producto se enfocan hacia la infraestructura carretera. Es decir, la importancia de los ferrocarriles pierde su primacía cuando el nuevo modelo de producción deja de usar dicha infraestructura como primaria para las nuevas condiciones de producción.

La propuesta sería: sacar el paso del ferrocarril de carga por la Ciudad de Tepic, pero dejando la infraestructura de vía ferroviaria para aprovecharla con el establecimiento de un tren urbano para movilidad de personas, y/o también se pueden aprovechar como un destino turístico en donde se establezca un museo histórico de los ferrocarriles mexicanos en las actuales oficinas y estación, en donde el turista pueda tener la oportunidad de un corto paseo por la vías originales, explicando la importancia económica de su momento, pasando por las nuevas zonas comerciales (se agradecen los comentarios del Dr. Rigoberto Zepeda).