Por Alberto Martínez
En Nayarit, tierra de mucha grilla política por tener cuatro elecciones en un sexenio, todo mundo se conoce. Aquí todos los actores políticos tienen una identidad y una pertenencia política, a grupos de poder o empresariales, pero todos sin excepción tienen rienda. Es falso entonces que existan liderazgos y autónomos o independientes. No existen y a la fecha después de 28 años de andar en este mundo, no conozco a uno que sea del todo huérfano.
En esta ocasión nos vamos a ocupar de los dirigentes empresariales. Eso para que usted amable lector no sea sorprendido por falsos redentores o políticos que aseguran con lagrimeo no ser parte de un partido o grupo político o de poder. Eso es casi imposible en Nayarit, porque para ser exactos todo ente tiene alguna pertenencia a persona o grupo empresarial y eso lo sabemos todos los que por años hemos andado en la brega de la política.
La CANACINTRA.
Este sector de la Industria de la Transformación, es dirigido con Roberto Milton Rubio, empresario al que vi crecer allá en el barrio de la Pedraza, conozco desde su descendencia. No puede negar, mi amigo, Roberto Rubio, su parentesco con uno de los cuadros del PRD, concretamente con Amado Rubio Castañeda, al que siempre ha apoyado y al que obedece en todas las contiendas políticas.
Además no debemos olvidar que este grupo de perredistas, tienen filiación o son socios del Grupo Empresarial Álica, que preside, ahora, Antonio Echevarría García. Este consorcio ha sido por demás un activo político, pues lo mismo tienen cuadros dentro del Partido de La Revolución Democrática como del Partido Acción Nacional, esto para que sus alfiles operen a su favor en los tiempos políticos. Por lo tanto, amable lector, la CANACINTRA, no puede llamarse un organismo apartidista y su dirigente si lo pregona miente.
LA COPARMEX.
El Consejo Patronal de la República Mexicana, LA COPARMEX. Aquí se agremian los patrones, esos propietarios de un los negocios que usted ve por todas partes en Tepic y Nayarit. Su presidente, es Alfonso Pérez Ochoa, hijo de Don Alfonso Pérez Ramírez, copropietario de la empresa agroindustrial, ALPERA, en donde también es socio el Grupo Álica. Aquí la mayoría de los agremiados pertenecen al Partido Acción Nacional y no lo pueden negar.
De ese organismo salió para ser candidato del PAN a la presidencia municipal de Tepic, su ex dirigente, Vicente Romero Ruiz, en los tiempos del Cambio, cuando gobernaba, Antonio Echevarría Domínguez. Eso solo por citar a uno de sus más recientes mandos. Además a través de este organismo el Partido Acción Nacional, opera a su favor todo en política. No puede el joven, Alfonso Pérez Ochoa, tampoco ponerse la sotana de apartidista, cuando su azul y más profundo que el mar. No se engañen.
Los hechos.
Hace unos tres meses en céntrico hotel de la capital nayarita, se organizó un debate entre dos diputados federales del PRD. Por lado, Guadalupe Acosta Naranjo y la señora, Martha Elena García Gómez; ambos compiten por la candidatura a gobernador de la posible alianza entre el PAN y el PRD. Ahí se observo como los empresarios tanto azules como amarillos iban de lleno a apoyar a Martha Elena, pero el audaz de Acosta Naranjo se hizo acompañar de su pléyade de actores sociales para ser apoyado en ese evento.
Si en verdad los dos dirigentes, el de CANACINTRA, Roberto Milton Rubio y su colega, de COPARMEX, Alfonso Pérez Ramírez, quieren despintarse su pertenencia política que a todas luces se conoce, necesitan volver a nacer, pero en otro planeta, porque a donde lleguen por su familiaridad o sociedad de negocios, siempre van a tener dueño, identidad y lo que es peor, se les observa la cadena que los jala. Son como los perros de casa siempre hay una mano que los conduce.
Los empresarios.
Durante los procesos electorales y después de haber participado en más de cuatro campañas a gobernador. Puedo ahora con toda seguridad que hay empresarios que nunca juegan a perder. En lo personal e individual, sus negocios patrocinan lo mismo las campañas de un aspirante del PAN, pero también lo hacen con alguno del PRI o del PRD. Juegan una baraja amplia y siempre están a la expectativa y a tiempo conocen quien va adelante en las encuestas y con ese se recargan.
En el sector empresarial es imposible que haya una ideología propia o si quiera una identidad de izquierda o derecha. Su principal objetivo es la riqueza, el obtener dinero y hacerlo es su meta. Para eso son empresarios y se les reconoce porque sostienen la Planta Productiva, es decir son los generadores de empleo, solo que cuando participan en política, lo mismo le dan el respaldo al PRI, al PAN o al PRD. Para todos tienen su guardadito debajo del colchón porque en verdad todavía en Nayarit, tenemos patrones que guardan su riqueza en su casa y debajo del colchón, porque desconfían hasta de su sombra.
Certeza.
Negar su pertenencia o filiación política, no les queda a los dirigentes empresariales.
Todos nos conocemos aquí en Nayarit y se sabe todo en este pueblo. O se les olvida que esos líderes que quieren aparecer como apartidistas que en el Gobierno del Cambio, se despacharon con cientos de millones de pesos sus empresas y todo a fondo perdido. Si quieren más leña para la hoguera todo es cuestión de que se llamen ofendidos y se metan a redentores o agentes de la democracia, porque ya amenazan hasta con ser observadores electorales, cuando todos sabemos que eso es un pretexto para vigilar y ser los orejas, del Grupo Álica. Suerte a todos y no se preocupen los tenemos detectados.
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