
Fernanda Cisneros-Janeth Castrejón
¿Quién no ha acudido alguna vez a la farmacia sin receta, a adquirir un medicamento recomendado por algún amigo familiar?
Hoy en día, el autocuidado se entiende como la voluntad y la capacidad de las personas para participar de manera inteligente y autónoma (es decir, informada) en las decisiones y en la gestión de las actividades preventivas, diagnósticas y terapéuticas que les atañen, entre las que se incluye la automedicación.
La automedicación es una práctica ancestral y cotidiana en todos los países del mundo. Se ha definido de forma clásica como: el consumo de medicamentos, hierbas y remedios caseros por propia iniciativa o por consejo de otra persona, sin consultar al médico.
En norte américa la automedicación se ha convertido en la primera causa de muerte accidental entre las personas de 45 a 54 años.
La organización mundial de la salud (oms) ha propuesto el uso racional de medicamentos (urm), como una estrategia que se define como el empleo correcto y apropiado de los medicamentos y que previene los efectos adversos de la automedicación, entendiéndose, esto último, como el uso no racional de los mismos.
Cuando un individuo decide tomar un medicamento que no ha sido prescrito por su médico, toma como referencia, a su propia idea sobre lo efectivo que puede llegar a ser dicho medicamento. El concepto que cada individuo crea con respecto a un medicamento u otro se basa en experiencias anteriores, ya sean individuales o colectivas; a través de persona a persona, en la lectura de alguna fuente de información confiable o no, o en la novedad de un medicamento con la creencia que mientras más nuevo sea es más eficaz, entre otras causas.
Cuando el paciente lleva a cabo su autocuidado, puede fácilmente subestimar la severidad de su enfermedad, lo que desencadena un agravamiento de la misma y genera gastos económicos superiores para el sistema de salud o el propio bolsillo de la persona, que en este punto debe responder a una enfermedad más compleja que la inicial.
De acuerdo con una encuesta de la universidad del valle de méxico (uvm), el 78 por ciento de los mexicanos recurren a la automedicación, principalmente por usos y costumbres.
Además, la uvm también subrayó, que entre un 11 y 17 por ciento de los ingresos hospitalarios son por el consumo de medicamentos sin una receta médica.
En nuestra sociedad la automedicación no ha tenido los medios adecuados para desarrollarse de la manera correcta, lo que ha ocasionado un problema mayor tanto de manera individual así como para la sociedad.
Los medicamentos que las personas más consumen por su propio juicio son antibióticos (ej. Amoxicilina) y analgésicos (ej. Paracetamol), entre otros, que la regulación sanitaria local mantiene dentro de los grupos de medicamentos de libre venta, tal como los antiácidos (ej. Omeprazol) y los antihistamínicos (ej. Loratadina).
Los antibióticos mal empleados conllevan consecuencias graves. Las personas que los usan, muchas veces los obtienen de recetas previas o recomendaciones de familiares y amigos. Estos medicamentos han sido creados para tratar microorganismo que alteran el funcionamiento normal de nuestro cuerpo y necesitan ser utilizados por un tiempo específico con la dosis exacta para realmente surtir el efecto deseado, sin embargo esto es algo que muchas veces no se toma a consideración y a causa de esto se ha venido generado la resistencia bacteriana, que provoca que las enfermedades sean más difíciles de controlar.
Por su parte, los analgésicos, que son de fácil acceso, son consumidos por un gran número de personas, y aunque por la forma en la que trabajan no genera resistencia a los seres que atacan nuestro cuerpo, como nuestro grupo anterior, estos medicamentos provocan daño a ciertos órganos, tales como riñón, hígado y cerebro, si no se usan de manera adecuada.
Tu salud no es juego, existen lugares y páginas que brindan información confiable sobre medicamentos como: drugs.com, que se pueden consultar cuando se requiere; sin embargo estas nunca podrán sustituir la práctica del médico a la hora de la elección del mejor tratamiento.
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Estudiantes de la unidad académica de medicina de la universidad autónoma de nayarit.
Contacto: jecj_9703@hotmail.com
Comentarios
xxxxxx
2017-06-08 10:56:28
uno consume lo que te dan el issste o el seguro un medicamento universal para curarte todo y el tipico no hay.