Francisco de León/El Sol de Nayarit
Las críticas, denuncias ciudadanas y reclamos sociales de nada sirven para Héctor González Curiel, presidente municipal de Tepic, quien pareciera estar encerrado en una burbuja, mientras las calles de la ciudad se encuentran en pésimas condiciones.
Las imágenes que hoy les presentamos dan cuanta clara de la ineptitud del llamado Toro, o como él mismo se denomina Torito, que con su triste papel desempañado hasta ahora, pone en riesgo la seguridad e integridad física de los habitantes de Tepic.
Muestra de ello, fueron los hechos que se registraron poco antes de las 7:00 de la noche de este martes, en los cruces de las calles Guadalajara e Hidalgo, donde un niño de aproximadamente 13 años de edad, de nombre Alberto, al cruzar la calle resbaló en la alcantarilla, quedando atrapado en ella con su pierna izquierda.
El niño, gritando de dolor y verdaderamente asustado, pedía ayuda a los vecinos, los que de inmediato se acercaron para auxiliarlo, pero nada pudieron hacer, pues la pierna del niño rápidamente se inflamó, evitando que pudiera sacarla.
Personal de Protección Civil fue hasta el lugar, los que comenzaron los trabajos de rescate.
Aun con todas sus herramientas con las que cuenta Protección Civil, tardaron más de 45 minutos en poder liberar y poner a salvo al niño.
Vecinos del lugar, verdaderamente molestos, comentaron que varias veces han solicitado a las autoridades municipales el arreglo de esa alcantarilla, pues en varias ocasiones peatones, ciclistas y motociclistas se han accidentado por las deplorables condiciones en que se encuentra.
Lo más lamentable es que esta condición se repite en cientos de alcantarillas distribuidas por toda la ciudad, las que se encuentran en condiciones pésimas, al igual que la función del torito la que ahora toda la ciudadanía tiene que pagar a consecuencias de tener a un inepto como Presidente Municipal en Tepic
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