Redacción/El Sol de Nayarit
Miércoles, 3 de Noviembre del 2010. 11:31:10 am
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La republicana Susana Martínez ganó el día de ayer la gubernatura de Nuevo México, lo que la convirtió en la primera hispana en alcanzar el máximo cargo político en una entidad estadunidense.
El triunfo de Martínez considerado sin precedentes dará además un giro político a esa entidad, ya que en los últimos dos periodos fue gobernada por el demócrata Bill Richardson.
Martínez, una abogada de 50 años, contaba con 59 por ciento de los votos, frente a la candidata demócrata Diane Denish, que registraba 41 por ciento, con el 33 por ciento de las urnas contabilizadas.
La tendencia, sin embargo, es considerada irreversible por las principales cadenas de televisión de Estados Unidos, que se apresuraron a declarar a Martínez como triunfadora.
Martínez es considerada una figura política emergente entre los republicanos, en el estado con mayor proporción de hispanos del país, superior al 40 por ciento, que tradicionalmente votan por los demócratas.
Con su elección de este martes, Nuevo México deja atrás ocho años de administración demócrata para dar paso a una nueva era republicana encabezada por una hispana.
En su campaña, Martínez aprovechó la baja popularidad del gobernador Richardson entre los residentes de Nuevo México, donde 57 por ciento desaprueba su gestión y sólo 39 por ciento la apoya.
La republicana ha trabajado duro para ligar a lo largo de su campaña a Denish, actual secretaria de estado, con Richardson.
Martínez nació en El Paso, Texas, en 1959 y creció en esa frontera donde se graduó de preparatoria y a mediados de la década de los ochenta, tras titularse de abogada en la Universidad de Oklahoma, cambió su residencia a Las Cruces, Nuevo México.
Viene de una familia trabajadora de clase media. Su padre y madre empezaron un negocio propio de guardias de seguridad con solo $400 dólares en sus bolsillos. Construyeron su negocio con la mamá de Susana haciendo el papeleo en la cocina y Susana trabajando como guardia de seguridad durante el día y estudiando de noche
Su carrera política y como funcionaria pública comenzó en 1996, al ser electa procuradora del condado de Doña Ana, en Las Cruces, cargo en el que fue reelecta en tres ocasiones.
Como procuradora, Martínez se ha enfocado al procesamiento de casos de abuso infantil y corrupción pública, lo que le ha valido varios reconocimientos estatales.
En el 2008, la revista Heart Magazine la nombró La Mujer del Año por su dedicación como defensora de los niños y sus esfuerzos para mantenerlos a salvo.
Como candidata a la gubernatura, Martínez se ha definido conservadora opositora al aborto, al matrimonio de homosexuales y a la adopción por parejas del mismo sexo, levantó su popularidad política resaltando la falta de confianza en la actual administración de Richardson.
La republicana, casada con un agente del Sheriff Chuck Franco, subcomisario del Condado de Doña Ana en Nuevo México, favorece además el derecho a portar armas sin que se realice una inspección de historial de la persona, aunque es partidaria de dedicar más fondos al combate de la delincuencia.
Durante su campaña recibió el respaldo de la ex candidata republicana a la vicepresidencia de Estados Unidos, Sarah Palin.
Martínez a pesar de ser hispana ha prometido mano dura contra la inmigración; su primera medida será dejar sin efecto la ley que ha servido para proporcionar a 50.000 inmigrantes indocumentados el carné de conducir y buscará el negar acceso a la educación superior con fondos estatales a hijos de inmigrantes ilegales.
Grupos pro inmigrantes y de Derechos Humanos han criticado la posición política de Martínez en el tema migratorio, considerando sus raíces mexicanas.
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