Por Javier Morales/El Sol de Nayarit
Lunes, 19 de Abril del 2010. 10:19:00 pm
Letra más grande
El próximo jueves 22 de los corrientes, cientos de colonos y campesinos humildes volverán a marchar por las principales calles de la capital del Estado para exigir que las Autoridades atiendan sus demandas de servicios básicos (agua, luz, drenaje, caminos, apoyo a productores, unidades básicas de vivienda) que desde hace varios años vienen planteando y que una buena parte incluso se encuentran autorizadas y firmadas para su ejecución, pero que al día de hoy, simplemente su realización no llega.
Cansados están de mentiras, prácticamente se han entrevistado con funcionarios de todos los niveles de gobierno, quienes han hecho compromisos incluso por escrito, pero una vez que llega la fecha señalada para el inicio de la obra, nuevas posposiciones y nuevas promesas, pero la solución a sus demandas no se lleva a cabo.
Para muestra de ello, enlistamos solo algunas de ellas, que se comprometieron y se firmaron en un documento en el mes de diciembre del año pasado, por el Secretario de Planeación, el Ing. Felipe Prado Hopner, quien señalo el inicio de obra dentro de los tres primeros meses del año que corre:
1.- Construcción de tanque, red de conducción y tomas domicilias para que familias humildes de la Colonia Unión Antorchista cuenten con agua potable en sus domicilios. Cabe señalar que esta demanda la vienen planteando desde el año 2001.
2.- Realización del proyecto ejecutivo para la realización de apertura de camino de la comunidad de Cofradía I a la comunidad de Gavilanes, municipio de El Nayar. La solicitud de la obra se realizó desde el año 2003.
3.- Realización de empedrados en las comunidades de Paramita y Mojocuautla, Municipio de Rosamorada. Obra comprometida desde el 2008.
4.- Red de energía eléctrica para las comunidades Unión Antorchista, en Tepic y Tecuitata en el Municipio de San Blas.
5.- Regularización de la Colonia Indígena, en El Buruato, Municipio de Santamaría del Oro.
Cabe señalar que además de estas demandas, cientos de familias esperan su incorporación a los programas sociales, tales como: unidades básicas de vivienda, apoyo a productores, oportunidades, letrinas y pisos firmes, que al igual que las demandas arriba señaladas no están siendo atendidas.
Lo que están solicitando los colonos y campesinos humildes son servicios básicos, que a nadie puede caber duda que son elementales, pero a pesar de ello no han encontrado la sensibilidad de la Autoridad para atender sus demandas.
Las cosas no están para bollos y los funcionarios lo saben, pero lejos de mostrar mayor sensibilidad para las necesidades de los Nayaritas, en vez de contribuir a disminuir con obras la miseria de la gente, hacen oídos sordos y con ello provocan que la irritación social aumente.
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